Hablemos de los Deberes Sagrados que los Peruanos de hoy debemos cumplir (continuación).

20/11/2022

En Reddeportiva.net opinamos que gran parte de las dificultades que enfrenta el ciudadano peruano tanto para convencerse 1) que estamos encontrando “el camino” hacia el bien común; como también 2) que nos estamos orientando hacia una superación de los obstáculos que enfrenta nuestro desarrollo nacional; se debe a que hasta la fecha no concibe una explicación razonable sobre lo ocurrido ideológica, política y económicamente en el país durante los últimos 30 años; así como la importancia de la primacía de la realidad versus “la verdad”, cuando se quiere encontrar la evolución histórica, el sentido de la misma y si tenemos claridad sobre los objetivos nacionales y “la ubicación” del bien común.

“El problema” se hace presente cuando tomamos conciencia que el principal mensaje de los medios de comunicación, orientados hacia el pensamiento único, impulsó la idea que el segundo gobierno de Alan García fue malo, cuando todos recuerdan la gran cantidad de obra pública que se edificó durante el mismo, como también la gran cantidad de servicios públicos que entraron en operación o mejoraron la calidad de su gestión durante dicho periodo.  Sin embargo, estos medios de comunicación hablaron maravillas de los gobiernos que siguieron luego a los cuales llenaron de elogios.   Sin embargo, la ciudadanía relaciona estos últimos gobiernos con una caída en la calidad de la institucionalidad, de la organización de nuestro Estado y de los valores sociales; así como también de la toma de determinadas decisiones que ahora están apareciendo como las responsables de los principales errores que nos han precipitado en la importante crisis que nos viene afectando en estos días, en que sufrimos las peores consecuencias posibles como es el récord de víctimas y sufrimiento durante la pandemia, que sólo pueden atribuirse al debilitamiento de los fundamentos humanitarios que impidieron una apropiada respuesta de las personas llamadas al control Ético y Moral en nuestra sociedad , como también del entrampamiento jurídico y la exacerbación de la confrontación que nos hace recordar las etapas previas al terrorismo; y, que nos está condenando al pago de peajes entre otros abusos del derecho que las autoridades no han podido detener ni sancionar ejemplarmente, lo que sólo se puede entender como una contradicción que exige una explicación, en razón que no se entiende el cómo no se pueden detener el deterioro de la sociedad y de los servicios públicos, a pesar de contar con recursos y reservas en niveles nunca vistos en nuestro pasado.

Aparentemente, esta incapacidad tendría su origen en la sostenida falta de transparencia en la política peruana cuyo origen y soporte permanecen sistemáticamente ocultos.  Normalmente los planes y las acciones son ejecutados luego de diagnósticos insuficientes, mal hechos o mal interpretados por los gestores de las instituciones públicas cuando evalúan su entorno estratégico.  Se critica válidamente que la solución de nuestros muy complejos problemas de la Administración Pública no encuentran solución por su falta de permeabilidad a las necesidades de la población y al poco rigor que ponen en su gestión por alcanzar los objetivos del bien común, lo cual bien puede superarse si se fomentara la transparencia en todos los actos relativos a la administración como son las Políticas, Objetivos, Planes y otros elementos que permitan a la Opinión Pública evaluarlas en su efectividad y rendimiento, en forma tal que faciliten la participación del ciudadano común y corriente tanto en el planteamiento de sugerencias, como en alcanzar el convencimiento que se está haciendo lo posible por atender sus necesidades.

Es así como llegamos a la actitud de los principales medios que les dan el micrófono a personas que impulsan sus intereses particulares, pensando más en la libre empresa que en la libertad de prensa.  Lo que sucede es que el pueblo sí tiene una clara conciencia del sentido de la historia, por lo que a la larga estos medios van perdiendo audiencia y por lo tanto seguidores.

El hecho que los medios del pensamiento único no hayan reconocido su “mala conducta” sólo conduce a pensar que en cualquier momento regresan a las andadas en que manipularon sin tapujos ni ambages el ataque directo a las instituciones que debieron defender a la sociedad y las empujaron hacia el engaño y por lo tanto a la injusticia y el mal gobierno.

Las recientes declaraciones de la exministra de Salud Elizabeth Hinostroza no hacen otra cosa que justificar que se nombre la tantas veces reclamada Comisión de la Verdad en el tema de la pandemia con el fin de conseguir una evaluación y un pronunciamiento con la mayor amplitud de gobierno, sin detrimento del proceso penal que tiene sus propio trámite y sus propias investigaciones.

La ciudadanía tiene que convencerse que todo este caos en que vive nuestra sociedad, la cual no logra estructurarse con tranquilidad, se debe a un “río revuelto” intencionalmente creado por quienes tienen dinero suficiente para “invertir” en la confusión o por quienes estando en el poder o cerca de éste, desvían parte del presupuesto nacional con dicha intención.

En Reddeportiva.net estamos convencidos que el pueblo peruano sabe lo que quiere.  Lo que sucede es que fue sorprendido en su Buena Fe y que está llegando el momento en que se le tiene que rendir cuentas.  Es claro que el pueblo peruano tiene una clara conciencia de su destino.  Lo que sucede es que hemos normalizado nuestro entorno cultural originario y no nos damos cuenta de la necesidad de destacarlo.  En ese sentido es anecdótico cómo los ciudadanos venezolanos hablan sobre la enorme cantidad de restos arqueológicos en nuestro territorio, los cuales llegan hasta los 8 000 años de antigüedad, y de su convencimiento que eso no sucede en gran parte del continente americano, lo que claramente nos distingue y nos honra.

El pueblo peruano “sabe” que son fundamentales la salud y la educación.  No se puede dudar de esta realidad porque cualquiera que “quiera ver” se dará cuenta en cómo pone empeño, a cargo de su propio bolsillo, ante una falencia totalmente injustificada del Estado.

En otro momento hablaremos sobre el sistema republicano y los objetivos nacionales ya que la presente nota está saliendo muy extensa, por lo que debemos despedirnos.

Con el cariño de siempre,