Corrupción, pandemia y lecciones

El pueblo peruano está en la obligación de crear un sistema de prevención del fraude y la corrupción. El tema es primordialmente de organización social; desde los mecanismos de movilidad social, hasta aquellos que sirven para hacer valer sus derechos, que por onerosos normalmente favorecen la impunidad. Al respecto, queremos resaltar una situación muy particular como es el último proceso electoral para la renovación de la Junta Directiva del Edificio Perimetral del Estadio Monumental. Es del caso mencionar lo sucedido en el último proceso de fecha 13 de mayo de 2021. Para resumir los hechos debemos decir que el Presidente, que convocaba el proceso electoral a realizar, presentó su candidatura a la rerereelección ante la Asamblea de Palquistas la cual se sintió mortificada y exigió transparencia en el proceso electoral. El Presidente aceptó iniciar el proceso con el nombramiento de un Comité Electoral que se conformó con miembros propuestos por el propio Presidente y aceptados por aclamación por la propia Asamblea. Haciéndola corta, debemos decir que el Comité Electoral se constituyó e inició sus funciones encontrando la candidatura arriba mencionada como no conforme a las reglas que el mismo Presidente había puesto en vigencia con un tiempo muy ajustado y que sirvió para que la administración filtrara muchas otras candidaturas. Como el proceso electoral avanzaba inexorablemente, el Presidente ante sí y por su propia iniciativa decidió descontinuar el proceso electoral que se estaba desarrollando normalmente y se retiró de la asamblea llevándose mucho de la documentación, lo que no fue obstáculo para que el Comité Electoral terminara con el propósito para el cual fuera nombrado y diera a conocer el resultado al que se llegó. Resumiendo, el Presidente saliente se niega a reconocer los hechos arriba reseñados y el nuevo Presidente reconocido por el Comité Electoral no puede asumir sus funciones. La condena social tiene mucha importancia y debe ser empoderada. Desde esta tribuna pedimos a los ciudadanos que nos pongamos a caminar en la dirección correcta, dando nuestro apoyo moral y organizativo con el fin de crear los mecanismos necesarios para viabilizar y agilizar los procesos restitutorios con el fin de hacerlos económicos, haciendo posible el re-establecimiento del orden y la justicia a costos razonables.