Pero no todos los intereses creados son tan obvios y menos lo son algunos de los activistas que se presentan como independientes con mensajes que desinforman por su falta de madurez y/o de la profundidad que exigen las circunstancias. Tampoco faltan los malintencionados que pretenden cambiar la forma en que realmente se dieron los acontecimientos, en especial cuando de la identificación de los responsables se trata. Otros mensajes equivocados, que impiden definir objetivos nacionales, se generan por una exagerada priorización de los planes de corto plazo que se desconectan de aquellos de largo plazo, así como también por las urgencias que exigen soluciones inmediatas con márgenes de justica más allá de los límites usuales como consecuencia de la desesperación. En estos casos, la buena fe queda a salvo, justificando toda comprensión, en razón de la buena voluntad. Pero estas calificaciones tienen excepciones cuando se trata de personas, generalmente políticos, que se dirigen a la opinión pública utilizando medios de comunicación masivos. En este terreno debemos tener en cuenta que las casualidades no existen; y, por lo tanto, no pueden considerarse exentos de vínculos con intereses creados identificables cuando preguntamos a quién o quiénes favorece lo dicho.
Recientemente se ha estado diciendo a la opinión pública que todos tenemos algo de responsabilidad ante el hecho de que el comunismo haya llegado al poder usando las vías democráticas. Desde nuestro punto de vista esta interpretación no solo no es correcta, sino que aleja a la opinión pública de la verdad de fondo, constituyendo un esfuerzo por crear una narrativa exculpatoria para favorecer a aquellos que pueden considerarse como muy perversos y desleales ejecutores de un plan que claramente no solo iba destruyendo nuestra institucionalidad, sino que también destruía toda escala de valores empujándonos hacia un vacío que no tendría otra consecuencia que el caos; y es allí a donde hemos llegado. Habiendo quedado la institucionalidad casi en la nada, por ahora estamos dependiendo de un grupo reducido de personas que harían bien en plantear el reinicio del funcionamiento del Estado peruano poniéndose de acuerdo en unos pocos Valores y Principios que se identifiquen con el nacimiento de la república y las aspiraciones de alcanzar un desarrollo económico y social que nos permita ingresar a organizaciones internacionales que requieran a sus integrantes alcanzar los mejores niveles de vida a nivel mundial.
No podemos terminar la presente nota sin mencionar los peligros que subsisten como consecuencia del legado que nos dejan los últimos 20 años en que para Reddeportiva.net es evidente que el Perú fue víctima de un ataque organizado por fuerzas que hasta la fecha no solo están pasando desapercibidas, sino que tampoco han reconocido sus culpas y menos expresado su propósito de enmienda. Nos explicamos mejor, desde nuestro punto de vista, son los caviares quienes aparecen ante la opinión pública como los grandes responsables de haber puesto en marcha un siniestro plan para copar el Estado, lo que habrían conseguido con un final en el que pareciera cumplirse el dicho de que nadie sabe para quién trabaja. Pues bien, esto no es cierto. Los caviares son un sector de la población que actuó como clientela entregando su futuro y su seguridad social a un grupo con poder económico poderoso aún por identificar del que formó parte el llamado club de la construcción. En Reddeportiva.net le llamamos plutocracia y los consideramos como los principales responsables de la debacle de nuestro país por las siguientes razones: 1) En el espectro político, se cumplió el aforismo que pone énfasis en la afinidad de los extremos que trajo como consecuencia la intencional destrucción del centro político, porque el enemigo de mi enemigo es mi amigo. 2) En el manejo de la opinión pública, el ser propietarios de los medios de comunicación más influyentes les dio la capacidad para tomar las decisiones que impulsaron la creación del “pensamiento único” con el que se impusieron las acciones de dominación que perjudicaron el normal desarrollo social. 3) En el plano ciudadano, no se puede dudar que un plan estratégico para apoderarse del país fue ejecutado y que tomó los últimos 20 años el cumplir su ciclo vital, ya que en estos momentos pareciera que ha perdido el control del gobierno al cual llegó con variados métodos como el Acuerdo Nacional, la hoja de ruta, las campañas de odio y de confrontación, la retroalimentación de las encuestas, la creación de un lenguaje capaz de tergiversar contenidos, como también crear otros que les permitió poner en uso un poderoso sistema de criminalización de los enemigos políticos, entre muchas otras malas prácticas que no nos sentimos cómodos en recordar.
La tragedia del Perú es que la campaña de desinformación continúa con los siguientes objetivos: 1) Mantener en algunos sectores clave la idea de que nunca existió un plan de dominación social impulsado por un grupo plutocrático el cual es capaz de actuar sin el menor escrúpulo. 2) Continuar con dicho ataque concentrando sus recursos en objetivos prioritarios con el fin de hacerlo menos visible. En ese sentido, el ataque a nuestra sociedad se volcaría a impedir la institucionalidad del Estado, saboteando cualquier intento por hacerlo progresar, no solo alterando textos legislativos, sino permitiendo la corrupción y alejando la transparencia. 3) El plan estratégico de la plutocracia también persigue la destrucción de toda organización que pudiera servir para defender a los ciudadanos de todo tipo de abuso o calamidad y así poder sacar el máximo provecho cuando se presente la más mínima oportunidad. Es por eso que es necesario construir con urgencia verdaderos partidos políticos y reponer muchas de las organizaciones sociales como clubes de madres que permitan a la sociedad poder canalizar sus reclamos en forma eficiente y con los mejores resultados, así como cuerpos de voluntarios que ayuden a los grupos en abandono o con poca satisfacción de sus necesidades fundamentales.
La sociedad peruana debe tomar conciencia que el mal momento que está pasando se debe a que desde los extremos de los intereses económicos y políticos se ejecutó un plan con toda intención de destruir un centro al que se considera enemigo porque tratará de imponer valores de Libertad, Igualdad, reconocimiento de los méritos, entre otros Valores y Principios que enaltezcan a los hombres y mujeres de buena voluntad.
Con el cariño de siempre,
Notas anteriores sobre el tema: https://reddeportiva.net/principal/?cat=200