1. Vivimos en una sociedad totalmente desinformada.
2. Nos encontramos viviendo una profunda crisis de valores, impulsada por fuerzas que permanecen ocultas gracias al engaño premeditado de quienes actúan en cumplimiento de los encargos de éstas.
3. Somos víctimas de un intencional propósito de desinstitucionalización y desarticulación de nuestra sociedad caracterizada por su tradición católica, apostólica y romana; en la que el mestizaje constituye un elemento de fuerte cohesión y tolerancia.
4. Se está desarrollando una lucha orientada a generar un país mejor, a todo lo largo y ancho de nuestra sociedad, la cual pasa desapercibida porque extraños intereses se han apoderado subrepticiamente de puestos clave, desde los cuales se manipula el sentir de la opinión pública creando confusión y desconcierto.  Este sometimiento es posible gracias a alianzas políticas, formales o no, entre grupos de interés y grupos de poder.
5. La mayoría de los medios de comunicación, actuando coordinadamente, se han constituido en medios de dominación social especializados en el uso de métodos empleados por la sicología social.  Su actuación es determinante, no solo porque cuentan con subsidio estatal, sino también por el apoyo indirecto que reciben de la administración pública la cual sigue la norma de “a mis amigos todo, a los otros la Ley”, creando un peligroso vacío de poder, de imprevisible perspectiva.
6. Sostenemos que existe un “grupo dominante” de carácter plutocrático, cuyo accionar dominó la política pública.  Este grupo recibió el apoyo de fuerzas políticas vinculadas a mensajes de odio, que hacen uso intensivo de la práctica conocida como doble patrón de conducta.  Este decisivo apoyo les permitió ejecutar sus planes desde la sombra por más de 20 años, durante los cuales se tuvo carta blanca, por falta de oposición, en el uso del Presupuesto Nacional, favoreciéndose un sistema de clientes tan extenso que su corrección está teniendo consecuencias en un amplio sector de la economía nacional.
7. La alianza política mencionada en el punto anterior, ejerció las funciones de la administración pública utilizando extensamente el sistema conocido como de “puertas giratorias”, a la vez que creó un sistema contractual doloso con el fin de perjudicar los intereses del Estado Peruano.  Poco se ha dicho sobre los efectos nocivos de estos contratos y menos aún de determinados actos que aparecen como poco coherentes, sin mayor sentido socio-económico y hasta contradictorios en muy corto plazo, Como resultado de todo este embrollo, han surgido flujos de caja negativos y contingentes que deberán ser pagados en los próximos 40 años.
8. Este “grupo dominante” dispuso, en su propio beneficio, de la utilización del Crédito Nacional que con tanto esfuerzo reconstruyéramos, luego del “fujichock”.  Las decisiones vinculadas a estas operaciones financieras siguen pendientes de evaluación por parte del Ministerio Público y del Poder Judicial.   En ese sentido, podemos decir que los acuerdos de colaboración a firmarse con las grandes empresas vinculadas a los delitos de corrupción, no cuentan con una adecuada reglamentación por parte de los mencionados organismos, aumentando la incertidumbre en el manejo de las finanzas públicas.
9. Además del mencionado “grupo dominante”, es necesario hablar de los equipos de gobierno con los cuales interactuó, adecuándose a las circunstancias de cada uno de éstos.  Estas relaciones motivaron la creación de respectivas Comisiones Investigadoras en sucesivos Congresos de la República, cuyos dictámenes deberán seguir el proceso que les corresponda.
10. Mención especial merece el actual equipo de gobierno que se inaugurara con un fuerte acento de confrontación, el cual pareciera que está siendo abandonado por diversos motivos de los cuales podremos hablar en una próxima nota.  Se ha hecho evidente que el Perú no es similar a la Argentina.
11. Por ahora, solo quisiéramos decir que el nuevo mensaje se ha tornado ambivalente reflejándose como muy incierto ya que por un lado se acentúan actos que merman la institucionalidad del Estado Peruano; y por el otro, en forma paralela se genera planes de gobierno para dar la impresión que contamos con una efectiva administración pública.
12. La falta de transparencia del Gobierno Central es muy grande.  Solo podemos decir que estamos siendo afectados en forma cada vez más incierta.  Cada uno de nosotros puede dar ejemplos de carencias que están surgiendo y que no eran previsibles algún tiempo atrás.  Quien escribe estas líneas está percibiendo recortes presupuestarios en los servicios públicos que disminuyen la calidad de vida del ciudadano.  Podemos mencionar la falta de trabajo, por no decir de oportunidades; entre otros indicios que no corresponde señalar para que no se haga presente la política de arreglo de vitrina, con fines de seguir dificultando todo seguimiento al ritmo de la economía.
13. Da la impresión que está surgiendo un divorcio o distanciamiento entre el “grupo dominante” y el actual “equipo de gobierno”.  No debemos olvidar que el actual gobierno surge de la renuncia de un representante del sector pudiente de la economía.  Tampoco debemos olvidar que muchos representantes del uso intensivo del doble patrón de conducta no denuncian al modelo chavista como inconveniente para la realidad peruana.
14. En consecuencia, los medios periodísticos se están encontrando dentro de un disparadero en el cual peligran sus ingresos, hasta la fecha muy generosos, de parte del Estado Peruano.  Es de esperar que la tabla de salvación se encuentre en el sector de los grandes patrocinadores lo que obligará a los medios, que opten por dicho camino, a realizar cambios en su posicionamiento ideológico.
15. El horizonte peruano no está claro.  Hoy día hablamos de 2 millones de peruanos en el extranjero.  ¿De cuántos hablaremos al llegar el bicentenario?

A pesar de las circunstancias, nos despedimos.

Con el cariño de siempre,